El levantamiento de la encuesta, realizado por Massive Caller mediante llamadas telefónicas automatizadas, reveló un alto índice de rechazo del 95%, un dato que expertos como Gustavo López Montiel y Roy Campos consideran crítico. Según Campos, una tasa de rechazo superior al 80% indica que la muestra pudo haber sido reconstruida, lo que podría afectar la fiabilidad de los resultados.
Gálvez también comentó sobre una controversia reciente en la que Sheinbaum acusó a Massive Caller de solicitar ‘moches’ para manipular resultados a favor de la candidata de la oposición, una acusación que ha añadido tensión a una ya disputada contienda electoral.
Durante el evento, Gálvez reiteró sus principales propuestas, incluyendo su compromiso de eximir del pago de ISR a los trabajadores que ganen menos de 15,000 pesos mensuales, una medida que dijo, el presidente López Obrador intentó replicar recientemente para aquellos que ganan hasta 9,000 pesos. Además, criticó la gestión actual de los recursos de las Afores y prometió devolver estos ahorros a los ciudadanos mayores que no los han reclamado.
Gálvez fue acompañada por Manlio Fabio Beltrones, ex presidente del PRI y candidato al Senado, así como por líderes del PRI, Alejandro Moreno, y del PRD, Jesús Zambrano. También contó con el apoyo de Jorge “El Travieso” Arce, quien se lanzará como diputado, destacando la mezcla de política y popularidad en su estrategia de campaña.
Consciente de la necesidad de maximizar el apoyo en las urnas, la campaña distribuyó volantes instando a los asistentes a convencer y acompañar a diez personas a votar por la coalición opositora, reflejando una estrategia agresiva de movilización de votantes.
Mientras Gálvez celebra su liderazgo en las encuestas recientes, la realidad del panorama electoral sigue siendo compleja y disputada. Con varias encuestas mostrando diferentes márgenes y con la controversia sobre la metodología de las mismas, la certeza en los números sigue siendo un tema de debate.