Martí Batres, jefe de Gobierno de la Ciudad de México, emitió un llamado enérgico a no lucrar con el dolor de las víctimas del colapso de la Línea 12 del Metro, marcando desde hace tres años como un trágico suceso. En un contexto donde las heridas aún están frescas y la recuperación sigue en marcha, Batres reprobó la actitud de aquellos que, lejos de brindar apoyo genuino, buscaron sacar provecho de la tragedia.
“Hubo quienes no ayudaron en nada, ni de manera material ni de ninguna otra forma, pero buscaron lucrar con el dolor de la gente. Yo les diría ‘ya basta’. Ya basta de querer lucrar con el dolor de las personas”, expresó Batres durante su intervención en la puesta en marcha del Operativo Xochimilco.
El jefe de Gobierno destacó el compromiso constante de las autoridades capitalinas con las víctimas y sus familias desde el primer momento. En este sentido, mencionó que se estableció que ninguna víctima quedaría desamparada, y enfatizó en las acciones concretas llevadas a cabo en favor de los afectados:
- Atención médica y psicológica gratuita en 19 hospitales públicos y 7 privados.
- Designación de un funcionario público para cada víctima como enlace.
- Reembolso de gastos de medicinas.
- Gestión de becas y empleos.
- Proyectos de vivienda a través del Instituto de Vivienda.
- Indemnización gestionada con la compañía aseguradora.
- Suscripción de 118 acuerdos reparatorios.
- Énfasis en el proceso de justicia restaurativa, con el 92% de las víctimas y familiares optando por este camino.
Batres aseguró que el gobierno de la Ciudad de México continuará dando seguimiento a los casos que aún requieran atención, brindando tranquilidad a los usuarios al afirmar que la Línea 12 está plenamente reforzada, reconstruida y operativa desde el 30 de enero de este año. Esta línea, que beneficia a cerca de 400 mil usuarios del suroriente de la Ciudad de México, es vital para diversas alcaldías como Tláhuac, Iztapalapa, Xochimilco, Coyoacán e incluso Benito Juárez.
El llamado de Batres a no lucrar con el dolor de las víctimas resalta la importancia de un enfoque humano y solidario frente a tragedias de tal magnitud, reforzando el compromiso de las autoridades con la justicia y la reconstrucción de la confianza en los servicios públicos de transporte.